El panorama estudiantil es complejo, las derrotas que hemos sufrido han mermado profundamente la fuerza social hasta ahora acumulada. La aprobación de leyes tales como la LGE, la ley de financiamiento y la ley de acreditación consagran el modelo educacional mercantilista, forjado en dictadura y cimentado luego por los gobiernos continuistas de la concertación, desechando por completo las aspiraciones del movimiento popular por lograr una educación digna para todos los hijos de los trabajadores.
El consejo asesor presidencial fue, tal y como lo habíamos vaticinado, la instancia perfecta para que el bloque en el poder perpetúe el modelo neoliberal, consolidando el libre mercado. La LGE no suponía jamás una superación del modelo educativo de mercado, sino más bien avocaba reparos en temas netamente administrativos, objetivos totalmente distintos a los que el movimiento popular planteaba, lo que nos demuestra una vez mas las limitancias estructurales que ofrece el actual marco democrático burgués en torno a las demandas populares.
El movimiento estudiantil tiene necesariamente que estar a la altura del periodo; la lucha estudiantil no es y no puede ser un fin en si misma, las dinámicas y características propias de este no nos permiten por si solos logran cambios revolucionarios. El desafió hoy se desarrolla en torna al como lograr rearticular el movimiento estudiantil, enmarcándolo dentro de un proyecto mayor que involucre a todo el conjunto de nuestra clase.
La crisis del capitalismo, nos demuestra y confirma una vez más que el modelo económico imperante es pilar fundamental en el desarrollo de la sociedad de clases. Es a este modelo desigual de distribución de riqueza al que nosotros, como movimiento clasista y popular debemos hacer frente, desarrollando el poder popular en el seno de nuestras organizaciones, impulsando el horizontalismo y la democracia directa, demostrando con la practica que es posible construir un mundo nuevo de justicia y equidad.
El capitalismo no caerá por si solo, hoy en día es nuestro deber levantar y fortalecer una alternativa clasista y popular que nos permita en el corto plazo acumular fuerzas en todos los espacios sociales, proyectándonos estratégicamente hacia la consumación del socialismo libertario, porque definitiva y categóricamente la redistribución de la riqueza es imposible bajo el actual orden neoliberal.
Las tareas para el periodo son enormes, pero es imprescindible para todos nosotros que estamos en la trinchera revolucionaria, desarrollarlas cabalmente y aportar así hacia el avance cuantitativo y cualitativo del movimiento popular.
Adelante compañeros
¡¡¡Arriba los que luchan por el socialismo libertario!!!
Venceremos
Frente de Estudiantes Libertarios
Arica
No hay comentarios:
Publicar un comentario